Reflexiones ecuménicas sobre el cine Dorado 70

Antaño las salas cinematográficas COTSA eran manejadas atinadamente por el gobierno federal; sin embargo en la década de los 90 fueron vendidas a particulares y raíz de ello casi todas desaparecieron. Hubo algunas que prevalecieron un poco más, pero para sobrevivir se dedicaron a exhibir películas pornográficas. Tal es el caso del cine Dorado 70, que se convirtió en una madriguera de lujuriosos depravados que acudían a ese lugar para saciar sus más bajos instintos sexuales.
            Durante los últimos años me ha tocado leer varios artículos en periódicos y revistas, así como ver un par de videos relacionados con el cine Dorado 70, donde se expone que es un tugurio abominable casi casi como si fuera el segundo círculo del infierno descrito por Dante Alighieri, donde se encontraban los pecadores jariosos.
            Si bien es cierto que el cine Dorado 70 es un lugar impío, creo que hay que juzgarlo en su justa dimensión porque hubo una época donde brindaba una estupenda programación fílmica y hasta era un punto de convivencia familiar, tal como hace años lo comenté en mi sermón sobre el matiné en Durango en la década de los 80.
           Y para conocimiento de la actual juventud desorientada que solo conoce lo que les dice el internet y no se toman la molestia de leer libros o preguntarle a los más viejos, aquí les dejo algunas evidencias de demuestran la calidad de la cartelera del cine Dorado 70. Si le dan click a las imágenes, podrán verlas grandotas.

En los inicios de la década de los 90, la artista de moda Alejandra Guzmán y su película Verano Peligroso, acompañada ni más ni menos que por la película de El Sol Luis Miguel y su exquisita pieza melodramática “Ya nunca más” (que dicho sea de paso, me tocó ver ahí). Se puede apreciar que la cartelera permite la entrada de niños.


También de inicios de los 90, dos joyas cinematográficas: luchadores y el master Almada:



En la década de los 80 cuando estaban de moda los karatecas y ninjas agringados


Seguimos en los 80, y por supuesto no podía faltar la dinastía Almada. Nótese que la entrada era para niños y adultos


Ora que si se ponen muy exigentes, pos les demuestro que el cine Dorado 70 también exhibía “películas de arte”, respaldadas por el Instituto Mexicano de Cinematografía


Otro ejemplo de películas que hasta ganaban premios internacionales, basadas en historias escritas por miembros de la “élite cultural” mexicana como Héctor Aguilar Camín


Por si alguien aún duda que el cine Dorado 70 alguna vez fue honorable, nomás chequen lo que exhibieron en 1974.


Y la cereza en el pastel: aunque el cine Dorado 70 ahora sea un lugar blasfemo y maldito, en 1979 exhibió la película Amigo, filmada en honor del Santo Juan Pablo II con motivo de su primera visita a México (y que además aparece en la cinta). Fue protagonizada por Pedrito Fernández y Andrés García. 
Ya nomás por eso debía considerarse que la pantalla del Dorado 70 esta “exorcizada” de las cosas impúdicas que después se exhibieron.


Y para concluir mi sermón, les dejo este video del periódico Victoria de Durango que aborda el tema: