Pues he de confesarles que a su fraile favorito le encanta degustar sabrosas comidas del tipo que sean, desde sabrosos alimentos rancheritos de los poblados mas pobres que he visitado, hasta suculentos platillos de alta cocina internacional. Siempre que viajo fuera de la ciudad, me voy de turista gastronomico.
Debido a mi aficion por la cocina, estoy leyendo un libro interesante que se llama Nacionalismo Culinario de Jose Luis Juarez Lopez, donde cita a un vato llamado Alfonso Reyes que escribio una obra llamada Memorias de cocina bodega, donde aparece la patriota frase celebre del dia de hoy:
El mole poblano de guajolote es la pieza de resistencia en nuestra cocina, la piedra de toque del guisar y del comer, y negarse al mole casi puede identificarse con una traicion a la patria.
Estoy completamente de acuerdo. Desafortunadamente en Durango no hay un restaurante donde ofrezcan el verdadero mole poblano, y si ustedes quieren hacer patria consumiendolo, les recomiendo que busquen a un conocido o familiar que sea de aquellos rumbos para que prueben la receta original porque en los restaurantes de Durango no lo hacen bien, se los digo por experiencia.
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