Nota del Güeb(on) Master: No sé quien de ustedes fue el rajón que le comunico a Su Eminencia el excelentísimo Monseñor Bizarro, que no estaba publicada la tercera parte de esta historia, por lo que el padrecito me puso una buena zurrada y me descontó la quincena completa. Ahora si disfruten el presente sermón del viejito gruñón, dedicado especialmente para la mariquita sin calzones que fue de chismos@.
NOTA DE SU EMINENCIA: La tercera parte de esta emocionante entrega debió publicarse hace como ocho meses, pero como el Güeb(on) Master se sentía burócrata del gobierno, quería cobrar sin hacer nada. Maldito perro vividor, ya fue despedido sin que se le pague liquidación. Empezamos.
En la segunda parte de esta historia, les comentaba que en el aeropuerto de chilangolandia me encontré la revista Rolling Stone México con los integrantes de Metallica en la portada. Solo he comprado la revista en un par de ocasiones, y para serles franco, no me convenció. A su favor puedo decir que la calidad de la producción es impecable, el diseño es muy bueno y la mayoría de los artículos estelares cuentan con el punto de vista personal del redactor; en su contra, creo que mucha de la información es intrascendente, y a pesar de que los autores de los artículos expresan su propio punto de vista sobre algún tema, evidencian que no tienen un buen bagaje cultural en la cabeza que les permita exponer sus temas de forma interesante, demostrando así su ignorancia.
Entrando en materia, creo que el artículo de los Metallica fue realizado con mucha objetividad, se enfoca a presentar las opiniones emitidas por los propios miembros del grupo sobre los problemas inmediatos anteriores que hubo en la banda, y la grabación del disco Death Magnetic. De hecho, creo que hay dos puntos principales que resaltan en el reportaje: la relación amor-odio entre el baterista Lars Ulrich y el vocalista-guitarrista James Hetfield, y el papel decisivo de éste último en Metallica.
Quiero enfocar mi reflexión en el último punto. Ulrich hizo una declaración lapidaria en la entrevista, que en lo personal creo que define la vida de la banda, y de paso el concepto del disco Death Magnetic:
“No sabia que (James Hetfield) fuera una persona tan atormentada, y el hecho de que tenga que cargar con esa mierda todo el tiempo no se lo deseo a nadie”.
Y luego, en el mismo artículo nos presentan una anécdota de James Hetfield propia de las estrellas de rock que ya han perdido el contacto con el mundo real: Hetfield les ordena a sus compañeros que los conciertos deben tener una duración de dos horas, y si se pasan unos minutillos se enfurece ¿A poco cree que todo debe ser perfecto? ¿Los fanáticos se molestarán por que el grupo se aviente una rola de pilón?
James Hetfield es la persona tóxica de Metallica, y si no me creen, les recuerdo los hechos:
*Salió de bronca con Dave Mustaine, e influyo para que lo corrieran de Metallica.
*Le hizo la vida pesada al bajista Jason Newsted mientras estuvo en la banda, al grado de no permitirle que participara en proyectos independientes.
*Se pelea eternamente con Ulrich y quiere imponer sus condiciones.
*Por borracho y drogadicto, estuvo a punto de provocar que el grupo se desintegrara.
*Ni canta tan chido.
Todas esas actitudes de este vato desequilibrado resuenan en el devenir del grupo. El caso más reciente son las letras del disco Death Magnetic, que en realidad son un reflejo de su infierno personal. Imagínense, este vato purga todos sus problemas personales en forma de canciones, y ahí vamos de mensos a comprarlo para hacerlo más millonario.
En este punto de la lectura, ya me estaban contagiando la depresión de Hetfield y hasta reviví mi coraje hacia Metallica, pero después el entrevistador nos revela algunas de las actividades de que realizan los miembros de la banda con el dinero de la venta de sus discos, dvd, playeras y demás mercancías (yo deje de comprarlas desde 1991), y que se me hicieron hilarantes:
* Tienen un quiropráctico que los acompaña en las giras para darles masajes (se han de estresar mucho).
* Kirk Hammet regalando un porsche que perdió en una apuesta (¿Dónde quedaron esos cuates que eran tan sencillos como uno, y que por lo tanto nos identificábamos con ellos?).
* Robert Trujillo contratando entrenadores para agarrar condición en las giras.
* Hetfield rentando aviones para transportarse junto con su familia durante la gira.
* Lars Ulrich siempre ha sido rico (su padre fue un exitoso tenista), pero las enseñanzas que les da a sus hijos para que aprendan a vivir en la dura realidad son hilarantes. Copio textualmente su declaración:
Recién hicimos las maletas y yo no les ayude a empacar nada. Su nana tampoco condescendió. JAJAJAJAJAJA, casi casi los deja sin postre (pero se hubiera visto demasiado rudo)
* Y luego Kirk Hammet dice que
“es duro separarse de la familia cuando va de gira, pero en esta ocasión los dejé en Hawaii, y Robert Trujillo dejo a los suyos en Paris". Ufff, sin palabras.
Pos la mera neta, el artículo de Metallica publicado en la Revista Rolling Stone México con motivo de la publicación del disco Death Magnetic, no hizo mas que confirmar lo que ya sabía desde 1996: perdimos a uno de los mejores grupos en la historia del heavy metal, porque se entregaron descaradamente al público consumista, ávido de nuevas modas.
Juré solemnemente que nunca escucharía (¡y menos compraría!) el disco Death Magnetic, pero en la navidad de 2009 me lo regalaron ¿Qué sorpresas encontraría en dicha producción discográfica?
CONTINUARÁ…
