El incidente Metallica parte IV de IV – Reseña del disco Death Magnetic

Nota del Web(ón) Master:

Después de estar reflexionando 6 años, Su Eminencia el Excelentísimo Monseñor Bizarro ha decidido concluir la historia sobre el incidente Metallica y su disco Death Magnetic. Para refrescar la memoria y para quienes no hayan leído los sermones previos, ponemos a su disposición los capítulos anteriores de la saga:

Parte I – Los años maravillosos (2009)

Parte II – Días de confusión (2009)

Parte III – Las piedras rodando se encuentran (2011)

Ahora sí, abróchense sus cinturones porque Monseñor Bizarro dictará su sermón final sobre el tema, reseñando el siguiente álbum:

Grupo: Metallica

Disco: Death Magnetic

Año: 2008

Monseñor opina sobre el grupo:

Durante la década de los 80 del siglo XX revolucionaron el heavy metal, llegaron a las grandes masas con el álbum negro de 1991, y de ahí en adelante se convirtieron en una empresa voraz cuyo único fin es el lucro.

Para mayor abundamiento en el tema, favor de leer mis sermones mencionados al inicio de ésta cavilación. Gracias. De nada.

 Y sobre el disco Death Magnetic:

Los metallicas tuvieron un desliz grunge grabando los horribilisimos discos “Load” y “Reload”. Después de esas guarradas dijeron quesque iban a regresar a sus inicios metaleros y en 2003 publicaron un álbum llamado St. Anger, que no fue lo que pregonaban sino que se le entraron a la moda del New Metal. 5 años después dijeron quesque ahora si iba en serio eso de hacer un disco de thrash metal, y el resultado fue el Death Magenitc ¿En verdad regresaron a sus orígenes? Veamos:

Para esa desafiante tarea, el grupo contrató a un productor perrón llamado Rick Rubin ¿Y quién es ese vato, preguntarán los neófitos? Pues uno de los responsables de definir el sonido musical de nuestro tiempo. Ahí les van los nombres de algunas bandas que ha producido: U2, Audioslave, Red Hot Chilli Peppers, System of a Dawn, Tom Petty, Danzig, Rage Against The Machine, Johnny Cash, ZZ Top, Neil Diamond, Trouble, Smashing Pumkins, The Cult, Shakira,  Eminem, Lady GaGa y un larguísimo etc.

Pero sobre todo, quiero puntualizar la importancia de Rick Rubin mencionando dos trabajos destacados de su carrera: en 2013 produjo el álbum 13 de Black Sabbath (creadores del heavy metal) después de que la banda tenía más de 30 años sin sacar un disco con la alineación (casi) clásica, y también se encargó del Reign in blood de Slayer, una de las piedras fundamentales del thrash metal. No por nada Metallica lo buscaron para recuperar la contundencia de sus buenos tiempos, pero ¡Oh decepción! Si bien es cierto que la música es potente, se nota a leguas que también fue pensada para que fuera programada en las estaciones de radio comerciales. Además, mientras el dictador James Hetfield siga imponiendo arbitrariamente su opinión, poco podrán hacer los demás miembros para que la banda evolucione, y por lo tanto seguirán dando vueltas en el mismo circulo vicioso-comercialoso.

            Luego se dio una controversia porque la banda sacó el álbum con una mejor calidad de audio en la versión del video juego Guitar Hero, y quienes lo habían comprado en cd empezaron a quejarse porque la calidad del audio estaba distorsionada y bien gacha. Fue una estratagema mercantil para que los fanáticos compraran ambos productos, les digo.

  

  Pero no todo es malo. Por primera vez podemos escuchar a Robert Trujillo con Metallica en una producción de estudio y suena completamente integrado. Nomás pa´que chequen los antecedentes de bajista: estuvo en Suicidal Tendences, Black Label Society y con el mismísimo Ozzy Osbourne.

            Pero lo que realmente celebro de ésta producción discográfica, es que ahora si le dieron su lugar a Kirk Hammet. En el álbum St. Anger, Metallica decidió quitarle requintos a las rolas (porque era la moda) ¡Como se les ocurrió semejante burrada, teniendo a uno de los mejores guitarristas del planeta! Afortunadamente se dieron cuenta de ese grave error, y en el Death Magnetic es una delicia poder escuchar al gran Kirk Hammet completamente desatado ¡Bravo!.

Por otra parte, con motivo de la gira promocional de éste álbum, Metallica visitó dos veces nuestro país:

• En 2009 se presentaron 3 noches con llenos totales en el foro sol y grabaron las presentaciones para publicar el CD y DVD en directo llamado Orgullo, pasión y gloria.
• En 2012 tuvieron 8 fechas en el palacio de los deportes, donde presentaron nueva escenografía espectacular con motivo de la grabación de su película en 3D Through the never.

           

  En su momento mis amigos me preguntaron por qué no asistí a alguno de esos conciertos. Creo que Metallica han de ser devastadores en vivo, pero como me traicionaron hace mucho tiempo, pos busqué nuevas bandas que llenaron con creces su vacío y ahora ya no siento nada por ellos. Para trasladarme de Durango a otra ciudad para asistir a un concierto es una lana (porque no me gusta llegar a hoteles pulgosos ni racionar comida), y no pienso invertir mi dinero por ver a Metallica. 

  

Monseñor Bizarro recomienda especialmente las siguientes rolas:

• That was just your life. Buena rola para abrir el disco, potente y estupendos riffs guitarreros.
• Broken, beat & scarred. Es una rola que disfruto porque la música está muy bien trabajada, los instrumentos suenan muy acoplados y transmiten mucho vigor.
• The day that never comes. La clásica rola que es mitad balada, mitad rock salvaje y Kirk Hammet se luce en las guitarras. Por compararla con rolas del catálogo de la banda, es algo así como la de One, Fade to black o Welcome home (Sanitarium). Muy buena y todo lo contrario a la manipuladora The Unforgiven III, donde James Hetfield quiere seguir explotando la exitosa primera parte después de 17 años.
• Suicide & Redemption. Metallica recupera el espíritu de esas rolas de casi 10 minutos donde presentan extensas odiseas instrumentales. Bien.
• All nightmare long. La mejor canción del disco y la única heredera digna de los potentes inicios thrasheros de la banda.

 Veredicto Bizarro:

* A pesar de que contaron con uno de los mejores productores de nuestro tiempo (Rick Rubin), el disco Death Magnetic de Metallica se queda a medias en su intento por regresar al género que lideraron en su tiempo: el thrash metal.

* Mención honorífica al trabajo realizado por el guitarrista Kirk Hammet.

* A Metallica le sucedió lo mismo que a los Scorpions: por andar coqueteando con el mercantilismo, cuando quieren regresar a sus orígenes heavy metaleros ya no pueden desligarse de su tufo comercial, y por eso los rockeros de cepa los recibimos con renuencia.